Más allá de indigar la manera en que la película Ratas, ratones y rateros ha podido incidir en la producción local, resulta igual de interesante el reconocer la forma en que esta película marcó un hito entre sus más cercanos colaboradores. En la nueva etapa del cine ecuatoriano no se podría hablar de una relación directa con el momento social, puesto que muchos filmes surgen como una rendición de cuentas del pasado como: Entre Marx y una mujer desnuda, Alegría de una vez, Maldita, Fuera de juego, Cara o cruz, Crónicas, El duelo, entre otras otras.

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